Licenciatura en Edición: aprobada por el Consejo Directivo de FFyL

Nos alegra muchísimo comentarles que, a pesar de la abstención de minoría de docentes y graduados (ex Franja Morada) y de dos consejeros estudiantiles (PO y LSR), se aprobó hoy, 19 de agosto de 2008, en el Consejo Directivo de la Facultad con 10 votos a favor, el Proyecto de Reforma a Licenciatura de la Carrera de Edición (Res. CD 3762/08). El proyecto sigue ahora su camino hacia el Consejo Superior de la UBA, y, si no hay inconvenientes (no hay razones para pensar que puedan existir) debería aprobarse en forma definitiva antes de fin de año.
Finalmente. Este proyecto de Reforma de nuestra Carrera que se inició y por el que empezamos a luchar desde hace años (cuando aún éramos estudiantes), y que  en los útlimos dos años fue largamente debatido en nuestro claustro, llega después de innumerables reuniones, debates, luchas, y muchísimo esfuerzo por parte de todos los involucrados, a ser una muy posible realidad.
Al fin, luego de tantos años de lucha y representación de los intereses de nuestro claustro (que han sido en muchos aspectos particularmente arduos), surge la posibilidad real y concreta de convertirnos en Licenciados en Edición. La definitiva consolidación de nuestra Carrera, de nuestra formación como Editores con um mucho mayor dominio de nuestro campo de estudios, y con nuevas posibilidades, con nuevos senderos que se abren para nuestros actuales y futuros graduados.Este nuevo espacio, que aún tendremos que terminar de generar nos permite:

– Insertarnos con plenas capacidades y posibilidades en la vida académica universitaria, en igualdad de condiciones que las demas Carreras de la UBA, pudiendo ejercer la docencia universitaria (y concursar por cargos docentes más allá de la docencia auxiliar, lo cual antes nos estaba vedado); y desarrollar investigación académica en nuestro campo, para estandarizar, profesionalizar, repensar y llevar aún más lejos nuestra área de conocimientos.
– Acceder a formación de posgrado (maestrías y cursos de variada índoles)
que en su mayor parte hasta ahora nos estaba vedada (en ámbitos externos a la UBA, y en particular en el ámbito internacional) por no contar con títulos de licenciado.
– Competir y acceder a un sinnúmero de becas que hasta ahora no estaban a nuestro alcance, tanto para formación de posgrado, como para investigación.
– En lo profesional implica, además de generar graduados más sólidos en su formación para el desempeño de las diversas tareas del área, desarrollar intelectuales con capacidad de reflexión e inciativa propia para llevar adelante cualquier proyecto editorial en su totalidad, sin conformarse exclusivamente con el rol de «técnico auxiliar» al que muchos miembros de la industria quisieran relegarnos.

Un graduado capaz de pensar y reformular su propio campo de estudios, su profesión y su rol en dicha profesión. Eso es lo que será un Licenciado en Edición.  Pareciera
que tanto esfuerzo, finalmente valió la pena. El Plan que se eleva no es el proyecto utópico de nadie, pero es la realidad que construimos entre todos, que en un primera instancia no nos conforma completamente, pero que iremos redefiniendo y reconstruyendo con el paso del tiempo. Basta con que el espacio exista, y eso es lo que hemos logrado en esta instancia: que el espacio del Licenciado en Edición exista.
No podemos dejar de recordar y agradecer a todos los que con su esfuerzo
participaron y apoyaron una y otra vez este proyecto, que lo sostuvieron en lo
electoral, en lo cotidiano, en el debate, en la lucha.
Muchas gracias.