Apoyo a la ley de Revistas Culturales de la CABA

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El sábado 19/11 se presenta la “Ley Cascioli” de Promoción y Fomento a las Revistas Culturales Independientes y Autogestivas de la CABA. Convocamos a apoyar esta ley en este evento con charlas, bandas y feria de revistas. Será frente a la Defensoría del Pueblo de la Ciudad, histórico edificio de Ediciones de La Urraca, madre de publicaciones legendarias como Humor y El Periodista.
La iniciativa, que ya ingresó en la Legislatura porteña, busca declarar la producción autogestiva como patrimonio cultural de la Ciudad, construir políticas públicas que fortalezcan al sector, y saldar la deuda que el Estado porteño tiene con las revistas culturales.
Graduados y docentes en conjunto con las minorías de Edición impulsamos la iniciativa, continuando con el apoyo al desarrollo de una ley con estas características a nivel nacional, que logramos impulsar y aprobar en 2013 desde la carrera y la facultad.
En la presentación del expediente 888.719/13 logramos que se considere:
– Que la supervivencia, desarrollo y difusión social de las revistas culturales independientes en Argentina resulta una evidencia del surgimiento de nuevas formas de organización y producción cultural en nuestra sociedad, que reclama un tratamiento específico para el sector.
– Que la producción autogestiva de comunicación cultural independiente por medios gráficos e internet es de interés colectivo y nacional, a partir de lo cual se comprende la importancia de sostener el desarrollo integrado, equitativo y eficiente de toda su estructura productiva.
– Que la edición independiente es fundamental para expresar la diversidad de voces, producciones y realidades culturales, siendo necesario que tenga el apoyo público y estatal para resguardar sus fuentes laborales y difundir la multiplicidad de creaciones culturales que genera.
– Que la edición autogestiva crea vínculos que fortalecen una producción de la información fundamentalmente social y más democrática que aquella dependiente de otros intereses o grandes grupos económicos, por lo que es necesario garantizar su desarrollo e inserción social.
– Que resulta preciso impulsar con leyes y hechos concretos una forma de comunicación que vaya más allá de la mera competencia y el lucro, para promover la sostenibilidad de cada proyecto editorial y la convivencia de diferentes modos de percibir y expresar la vida cultural.
– Que siendo parte del patrimonio cultural argentino, las revistas culturales y las empresas autogestivas de comunicación que las sustentan requieren un trato impositivo adecuado a la realidad del sector y mayor vinculación con los mecanismos de difusión y circulación estatales.
– Que es importante proteger el interés del público de contar con mayor pluralidad de voces en la actividad editorial, cultural y periodística, frente a los intentos de monopolización de estas actividades que deben contar así con un necesario reconocimiento y protección pública.
– Que la comunicación es un derecho que los proyectos editoriales independientes y colectivos promueven y garantizan, abriendo un espacio de acción para un sector social y económico fundamental que aun no está suficientemente reconocido por la legislación vigente.
– Que es urgente abogar, en suma, por más políticas públicas destinadas a fortalecer y valorizar la producción del sector de la comunicación cultural independiente y autogestiva fomentándolo e impulsándolo con los recursos que el sector requiere para su crecimiento.
Más info sobre aquella iniciativa, en este link: https://eh8.19a.mytemp.website/masparamas/2013/05/apoyo-al-proyecto-de-ley-de-promocion-de-la-produccion-independiente-y-autogestiva-de-comunicacion-cultural/.
Las cifras del último censo realizado por AReCIA muestran que el aporte del sector a la industria gráfica pyme local supera los 4 millones mensuales, la tirada del sector es de casi 250 mil ejemplares mensuales en el caso de las revistas gráficas, y las digitales alcanzan un promedio de 4 millones de lectores mensuales. En cada publicación trabajan un promedio de 6 periodistas, y más de la mitad de las revistas culturales independientes se editan, imprimen, distribuyen y comercializan en la Ciudad de Buenos Aires.
El proyecto fue bautizado como “Ley Cascioli”, en referencia a Andrés Cascioli, director de Ediciones de La Urracaa. Hoy su familia se encuentra obligada a pagar demandas judiciales arbitrarias, luego de afrontar las deudas de una quiebra que originó el Estado que nunca le otorgó pauta oficial a esas publicaciones. Como parte de ese acoso, la editorial perdió el edificio donde hoy funciona la Defensoría del Pueblo.
El proyecto está dirigido a proteger y fomentar la producción independiente y autogestiva, tanto en formato gráfico como digital, y también a declarar el trabajo de producción independiente y autogestiva de comunicación cultural como patrimonio cultural de la Ciudad.
La iniciativa alienta al Ministerio de Cultura porteño a difundir y promover la sustentabilidad de las publicaciones, créditos con tasas accesibles del Banco Ciudad y a adoptar medidas para garantizar y proteger la distribución y circulación de las revistas.
Esperamos de todos el mayor apoyo a este proyecto para seguir impulsando la edición independiente y autogestiva.